viernes, 9 de noviembre de 2007

¿QUé SE ESCONDE DETRáS DE LA MAGIA DEL CIRCO?

Cuando la gente escucha la palabra circo, piensa en pochoclo, dulces, animales "salvajes" y diversión. Sin embargo, detrás de la magia del circo se esconde todo un mundo de sufrimiento animal. Estos animales, son obligados a participar de un show que termina afectando su salud física y mental.



El transporte puede ser una tortura

Algunos de los circos más importantes viajan durante aproximadamente 48 semanas al año, cubriendo enormes distancias.

La programación de los circos está hecha para maximizar la cantidad de espectáculos, no para alivianar el sufrimiento de los animales. En verano, algunos circos viajan a zonas de altas temperaturas en busca de público, obligando a los animales a padecer calores extremos dentro de los vehículos de transporte.

Lo mismo ocurre en invierno con las zonas de bajas temperaturas. Los animales son transportados en camiones o trenes. Los tigres viajan en jaulas, tan pequeñas, que no pueden siquiera voltearse. En estas jaulas deben comer, dormir y defecar hasta llegar a destino.


Por lo general, los animales no bajan de los transportes apenas llegan al lugar del espectáculo, esto es debido al tráfico vehicular, o porque han llegado más tarde o temprano de la hora señalada. En este caso, los animales son forzados a esperar dentro de los vehículos durante horas bajo condiciones extremas de temperatura.


Entrenados con miedo


Los circos obligan a los animales a realizar actos que no tienen ninguna semejanza con lo que estos animales están acostumbrados a hacer en estado salvaje.

Estas actividades antinaturales van desde un tigre saltando a través de un aro en llamas a osos montando bicicletas. Los animales salen muchas veces lastimados mientras practican estos trucos, por ejemplo tigres que sufren quemaduras.


Para entrenar a estos animales, con el objeto de que realicen actividades antinaturales, se necesita látigos, collares de ahorque, instrumentos para picar eléctricos, ganchos de metal y otras herramientas.

Cuando vea elefantes, podrá apreciar que los empleados del circo portan una herramienta llamada ankus (vara de madera con un filoso gancho en la punta) la cual se utiliza para evitar comportamientos no deseados. El ankus, se aplica en las zonas más sensibles del elefante, como los pies, atrás de las orejas, bajo el mentón, dentro de la boca y otras zonas de la cara, además de que muchas veces se utiliza directamente para golpear al animal.

La vida de constante confinamiento y frustración que llevan estos animales, los conduce a estados neuróticos. Se puede ver en los comportamientos estereotipados, como se el balanceo de la cabeza en los elefantes y el movimiento constante de los tigres dentro de las jaulas. Estas actitudes son síntomas claros de un stress psicológico muy profundo. En estado salvaje, los elefantes viajan grandes distancias y en grupo. En los circos, salvo cuando deben actuar, pasan el día encadenados por las dos patas, lo que les imposibilita caminar.


Es sabido que los elefantes forman fuertes lazos familiares, sin embargo, en los circos estas familias no existen o están separadas. Los animales de circo no proveen una verdadera herramienta educativa para el público, ya que son forzados a realizar trucos que no harían en forma natural si estuvieran libres. Lo único que los niños ven es animales desesperanzados que realizan lo que el medio hostil y antinatural les pide.


La seguridad pública: una causa de preocupación

Tener animales en los circos es una amenaza para la seguridad pública. El hecho de que haya animales salvajes en las calles debe ser para las comunidades una causa de preocupación. Cuando los animales son transportados en trenes, deben ser conducidos al sitio donde se instalará el circo.


Los animales y el tráfico están codo a codo en las calles. Además de las extremas temperaturas, deben pisar en asfalto caliente, no tienen acceso a agua, arboles o un pequeño charco de barro. Los entrenadores muchas veces privan a los animales de comida y agua para reducir la cantidad de excremento y como forma de entrenamiento.

Se han escapado elefantes de varios circos, provocando grandes daños, lastimando y matando personas. Desde 1990, 18 personas han muerto en Estados Unidos, y 86 resultaron heridas. En 1994, un elefante llamado Myke mató a su entrenador, y escapó por las calles de Honolulu, Hawaii, lastimando a varios espectadores y dañando propiedad privada.

La policía terminó dando muerte a Myke frente al público. Otros accidentes han sucedido debido a elefantes que se asustaron con las bocinas de los autos. Existen varios casos de tigres que han matado a sus entrenadores y escapado, atemorizando a comunidades enteras. Estudios realizados a elefantes de circo, han revelado que muchos están infectados con tuberculosis proveniente de humanos. Estos animales muestran mayores problemas inmunológicos desde que están en contacto con humanos, ya sea durante los comerciales o cuando pasean niños en sus lomos.

DULCE HOGAR

Enclavado en el seno de la montaña Waterberg, el parque nacional de Marake, en el Limpopo, sirve de transición entre la región oeste (seca) y este (humeda) de Sudáfrica. En esta tierra rica y montañosa, subsisten plantas y árboles únicos en el mundo, de los que algunas especias se remontan a la prehistoria. Aquí los animales se sienten en casa

El sur del continente africano que se extiende de Nambia a Zimbabue pasado por Sudáfrica, compone una región rica en paisajes insólitos y constituyen unlugar privilegiado para admirar la fauna y la flora africanas.





Circos divertidos

Existen circos que son divertidos y no promueven el abuso de los animales. Estos circos sin animales ofrecen un maravilloso espectáculo para la familia, llenos de suspenso y entretenimiento, pero más importante, sin sufrimiento animal.



CIRCOS PERO SIN ANIMALES


Muchas personas entienden que los circos con animales son una tradición, y por ello debemos preservarla. No creemos que esto sea así ya que una tradición es entendida como una transmisión de costumbres, creaciones artísticas hechas de generación en generación y la costumbre es un hábito adquirido por la repetición de ciertos actos.


Creemos que nadie puede justificar la obligación de mantener inmutable una institución tan digna y honrada como los circos sin evolucionar hacia formas más modernas porque la tradición basada en simple repetición de actos lo diga. Si fuese así podríamos decir que la historia avalaría a las luchas de gallos, peleas de monos, los circos romanos en donde luchaban hombres por su vida contra bestias feroces, o incluso las guerras de agresión o los genocidios ya que en la historia se han repetido sucesivamente.


Todas estas aberrantes “tradiciones” o “costumbres” fueron abolidas por el hombre, o al menos prohibidas, ya que nadie podía justificar su existencia. Esto mismo pasa con los circos, son grandes y respetables instituciones pero que deben progresar para el bien común.

1 comentario:

legislanimal dijo...

Hola. Te he escogido para el simbólico premiado de blog solidario. Debes escoger 7 blogs para seguir la cadena de reconocimientos